El uso de tecnología en discapacidad intelectual
El uso de tecnología en personas con discapacidad intelectual ha ido ganando relevancia en los últimos años, ya que las terapias digitales puede ofrecer diversas herramientas y recursos para apoyar el desarrollo y la mejora de la calidad de vida en este grupo de personas. Aquí te presentamos algunas formas en que las terapias digitales pueden ser beneficiosas:
En primer lugar, la adaptabilidad y la personalización que ofrecen es un punto muy importante. Las aplicaciones y programas digitales pueden adaptarse a las necesidades específicas de cada individuo, proporcionando un enfoque más personalizado en comparación con métodos tradicionales.
Los programas de estimulación cognitiva, están diseñados para estimular diversas funciones como la memoria, la atención, la flexibilidad cognitiva y las habilidades de resolución de problemas. Estas actividades pueden ser adaptadas a los diferentes niveles de habilidad en las personas con discapacidad intelectual.
Para aquellos que tienen dificultades en la comunicación verbal, existen aplicaciones y dispositivos que facilitan la comunicación a través de pictogramas, iconos o texto predictivo. Esto puede mejorar la comunicación y la expresión de necesidades. Los sistemas de comunicación aumentativa y alternativa, posibilitan que personas con gran discapacidad, sean capaces de interactuar con el entorno.
Incluso las terapias digitales pueden ser utilizadas en personas con discapacidad intelectual para proporcionar entrenamiento en habilidades prácticas de la vida diaria, como la organización, la gestión del tiempo, el cuidado personal y las tareas domésticas.
Por otra parte, siempre es necesario cuantificar la evolución de la persona con datos objetivos y gracias a las terapias digitales es posible. Las tecnologías también permiten a los profesionales realizar un seguimiento del progreso de la persona, identificar áreas de mejora y ajustar las intervenciones según sea necesario.
Necesidades variadas en personas con discapacidad intelectual
La discapacidad intelectual se caracteriza por limitaciones significativas en el funcionamiento intelectual y en la conducta adaptativa. Los niveles de discapacidad intelectual se clasifican generalmente según la gravedad de estas limitaciones. Aunque las categorías específicas pueden variar según los sistemas de clasificación utilizados en diferentes países o regiones, la clasificación más comúnmente utilizada es la de Leve, Moderada, Grave y Profunda/Severa.
Es esencial tener en cuenta que la discapacidad intelectual es un espectro, y cada persona es única. La clasificación en niveles proporciona una guía general, pero no puede reflejar completamente las capacidades y desafíos específicos de cada individuo.
Por eso, la terapia se necesita personalizar y eso es precisamente lo que facilitan las nuevas tecnologías, adaptabilidad y personalización.
¿Qué son las tecnologías adaptadas?
Las tecnologías adaptadas, también conocidas como tecnologías de asistencia o tecnologías adaptativas, son herramientas diseñadas para mejorar la calidad de vida y aumentar la autonomía de las personas con discapacidades. Estas tecnologías están diseñadas específicamente para compensar las limitaciones funcionales de las personas con discapacidades y para facilitar su participación en la sociedad. Algunos ejemplos de tecnologías adaptadas incluyen:
- Dispositivos de Asistencia para la Movilidad:
- Sillas de ruedas eléctricas o manuales.
- Scooters de movilidad.
- Andadores y bastones especiales.
- Dispositivos de Comunicación:
- Sistemas de comunicación aumentativa y alternativa (AAC), que pueden incluir tableros de comunicación, aplicaciones de comunicación en tabletas, etc.
- Sistemas de reconocimiento de voz para personas con dificultades para hablar.
- Tecnologías Visuales:
- Lectores de pantalla y software de ampliación para personas con discapacidades visuales.
- Dispositivos táctiles y auditivos para la navegación.
- Dispositivos de Acceso a la Computadora:
- Teclados y ratones adaptativos.
- Software de reconocimiento de voz.
- Dispositivos de entrada alternativos, como interruptores.
- Dispositivos de Ayuda para la Audición:
- Audífonos y sistemas de bucle magnético.
- Implantes cocleares.
- Dispositivos de Asistencia en la Vida Diaria:
- Utensilios y herramientas diseñados ergonómicamente.
- Sistemas de apoyo para la cocina y el hogar.
- Tecnologías de Apoyo Educativo:
- Software educativo adaptado.
- Libros y materiales digitales accesibles.
- Dispositivos de Asistencia para Cuidados de la Salud:
- Dispositivos de monitoreo de la salud adaptados.
- Sistemas de dispensación de medicamentos.
La tecnología ayuda a la inclusión
Claramente la tecnología desempeña un papel fundamental en la promoción de la inclusión social al proporcionar herramientas y recursos que eliminan barreras y permiten la participación equitativa de todas las personas, independientemente de sus habilidades o discapacidades.
Sin embargo, algunas personas pueden sentir desconfianza o temor hacia la tecnología, ya sea debido a la falta de comprensión sobre cómo funciona, preocupaciones sobre la privacidad o la seguridad en línea, o simplemente una resistencia hacia lo desconocido.
Las personas con discapacidad o las personas mayores a veces pueden experimentar un rechazo a la tecnología debido a la falta de familiaridad con dispositivos electrónicos. La brecha generacional en la adopción de tecnología es un fenómeno común.
Gracias al uso de tecnología en la atención a personas con discapacidad, podemos trabajar para facilitar la inclusión y tratar de disminuir la brecha digital.